Como adelgazar sin comprometer la salud
El exceso de peso no solo es una cuestión estética sino que es un problema que afecta la salud. Estudios científicos demuestran la relación existente entre la obesidad y enfermedades como la hipertensión arterial, los trastornos cardiocirculatorios, la diabetes, la elevación del colesterol, la artrosis y la formación de cálculos biliares.
El exceso de grasas en el cuerpo ocasiona alteraciones del organismo comprometiendo la salud de las personas.
¿Porqué es tan frecuente este problema en nuestra sociedad?
Principalmente por la deficiente calidad de los alimentos debido a la agricultura intensiva, la ganadería industrial y la elaboración de productos refinados y precocinados. El exceso en el consumo de este tipo de alimentos y el menor ejercicio físico (sedentarismo) son las principales causas del sobrepeso y la obesidad.
En España, según datos de la Sociedad Española para el estudio de la obesidad el 13,4 % de los españoles entre 25 y 60 años son obesos.
Muchos de los alimentos que se nos ofrecen en los supermercados son productos refinados y en su manipulación (precocinado, envasado,…)pierden gran parte de sus nutrientes, minerales y vitaminas al tiempo que presentan un elevado contenido en calorías. Por su sabor, presión publicitaria de la industria alimentaria estimulan y facilitan su consumo. Así la bollería industrial, aperitivos y comida precocinada son consumidos diariamente. Esto sumado al sedentarismo provocan la ganancia y el exceso de peso en la población.
Perder peso naturalmente y sin comprometer la salud
Perder peso no es una cuestión sencilla ni exenta de riesgos. Cada primavera, es alarmante, la cantidad de métodos y dietas de adelgazar que aparecen sobretodo, en publicaciones y revistas dirigidas al mundo femenino y que pueden resultar peligrosas para la salud. Los problemas que pueden ocasionar estas dietas inadecuadas, de todos son conocidos.
Adelgazar es un proceso en el que se pone a prueba nuestra paciencia, la fuerza de voluntad y la fe en alcanzar el peso adecuado y mantenerlo en el futuro. Por ello es muy importante ponerse en manos de profesionales expertos en nutrición y dietética que primero elaboren una seria historia clínica para luego guiarnos en el camino de perder peso; con controles periódicos para ir corrigiendo posibles complicaciones que surjan, instaurando, más que una dieta, un plan de apoyo ameno y personalizado, revisando en profundidad los hábitos inadecuados para adquirir una alimentación y una forma de vida que nos aseguren un resultado definitivo, es decir, después de alcanzar el peso adecuado conseguir mantenerlo en el futuro. Este plan debe estar basado en el apoyo para corregir las causas que nos han llevado al sobrepeso y no creer en fórmulas fáciles, ni en dietas milagrosas. Es decir no se puede pretender perder los kilos ganados durante años en un mes, pues la quema rápida de grasas conlleva graves riesgos para la salud, ejemplo de las dietas cetogénicas, hiperproteicas o desequilibradas y el arriesgado empleo de fármacos adelgazantes, por sus importantes efectos secundarios y sobretodo por el “efecto rebote” que provocan, es decir al dejar de hacer la dieta milagrosa y/o de tomar el fármaco adelgazante la recuperación del peso es rápida.
La pérdida rápida de peso, suele comprometer la salud y dificulta el futuro mantenimiento.
El camino de adelgazar debe ser un camino sin prisas, donde se sienten las bases del futuro mantenimiento, instaurando, de forma progresiva, un estilo de vida y una alimentación adecuada a cada persona.
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