Llevar una dieta saludable proporciona a los niños y adolescentes todos los nutrientes esenciales para un crecimiento adecuado. Esto incluye huesos y músculos fuertes y saludables. Previene la anemia ferropénica, la desnutrición o el estreñimiento. Y reduce el riesgo de enfermedad cardiovascular.
Es vital para la salud de cualquier persona llevar una dieta variada y equilibrada. Más aún para los niños. Necesitan muchos alimentos de alta calidad que les proporcionen todos los nutrientes que necesitan para crecer sanos y fuertes. Asimismo, protege contra virus, bacterias, hongos y otros microorganismos que se transmiten por contacto mano a mano, por contacto piel a piel, por gotitas respiratorias y por objetos contaminados.